¿Debo utilizar un insecticida en aerosol?

Tratamientos de pulverización en el aire. La pulverización en el aire -técnicamente nebulización (a veces denominada aerosol)- es la aplicación de un insecticida líquido que se dispersa en el aire en forma de cientos de millones de gotitas diminutas de menos de 50 µm de diámetro. Solamente es eficaz mientras las gotitas se mantengan suspendidas en el aire.

El embarazo y la infancia son los periodos de mayor vulnerabilidad al uso de insecticidas domésticos. Según estudios realizados concluyen que más de la mitad de las mujeres que esperan un hijo utilizan estos compuestos de forma rutinaria y el método más utilizado por las mujeres fue el espray insecticida.

En cuanto al spray contra insectos, es nocivo si se lo utiliza en altas dosis, ya que puede afectar tanto a los pulmones de los humanos como a los de las mascotas. “Cada vez los hacen más fuertes y con más variantes. Lo que cambia es que algunos son más puros, tienen más solventes”,

Elemento tóxico

La mayoría de los repelentes de insectos contienen DEET (N,N, dietil-meta-toluamida) como su ingrediente activo. La DEET es uno de los pocos aerosoles contra insectos que funciona para repeler insectos. Se recomienda para la prevención de enfermedades transmitidas por mosquitos. Algunas de estas son la malaria, la fiebre del dengue y el virus del Nilo occidental.

Ingredientes tóxicos y sus efectos

Entre sus ingredientes activos estás las piretrinas, una mezcla de compuestos orgánicos con fuertes propiedades insecticidas. Estas tienen un montón de efectos conocidos sobre los seres humanos si lo inhalan, incluyendo dificultad para respirar, tos, alteración de la conciencia debido a fluctuaciones en el nivel de oxígeno, y las cantidades grandes pueden llevar a sentir temblores, convulsiones o trastornos estomacales con o sin vómitos.

Los insecticidas en aerosol no deben utilizarse como método único

La forma más efectiva de reducir o eliminar el problema de las plagas y los riesgos que presenta el uso de pesticidas es, en primer lugar, evitar que estas entren en su casa. Las medidas que debe tomar en su hogar y alrededores son las siguientes:

  • eliminar las fuentes de alimento y agua (tales como tuberías con fugas)
  • destruir los refugios y sitios donde se reproducen las plagas (tales como restos de basura y plantas).

En utilizamos solo productos autorizados y regulados por la Comisión estatal para la protección contra riesgos sanitarios (CEPRIS), que coordina la Secretaria de Salud, dichos productos no provocan manchas, sin olor, son biodegradables con fotodescomposición por efectos de radiaciones solares, ligeramente persistentes, con efecto inicial y residual de amplio espectro, que actúan por contacto e ingestión y son exclusivos para el control de plagas en salud pública, domésticas, comerciales e industriales. Por lo que pueden ser seguramente utilizados en el entorno de seres humanos y mascotas.