Las garrapatas son pequeños parásitos de la familia de las arañas. Se alimentan de sangre de los animales o de las personas a las que se adhieren.
Nuestro perro puede infestarse de garrapatas en cualquier lugar, sobre todo en parques o lugares con vegetación. Estos parásitos no solo provocan irritaciones cutáneas, sino que también pueden ser portadoras de graves enfermedades.
Al detectar garrapatas en su perro, busque ayuda profesional que coordine el tratamiento del perro (calendario de baños con producto especializados) y del control de la plaga de su vivienda, en este caso se incluirán aspersión de pisos, techos, muros en interiores y exteriores, incluyendo base de camas, colchones, jardín y traspatio.
